viernes, 20 de septiembre de 2013

De cómo Dennis Rodman acabó con la igualdad en Corea del Norte

Bien es sabido que el famoso y excéntrico exjugador de baloncesto de la NBA Dennis Rodman ha hecho migas con el dictador de Corea del Norte Kim Jong-un. Lo que ni de lejos sospechaban el mandatario y el deportista es que su visita a la cancha de baloncesto del equipo local iba a suponer una alteración sustancial en el logro de la igualdad social que tan a gala tienen los norcoreanos. Y todo por no saber estadística...

El coeficiente de Gini

El coeficiente de Gini es un instrumento que se utiliza para medir la desigualdad de una población. Es un valor entre 0 y 1 donde 0 significa la igualdad perfecta y 1 todo lo contrario. La wikipedia tiene una entrada sobre el mismo donde está más o menos bien explicado. (Mejor, mucho mejor, en inglés. ¡Qué pequeño es el mundo de quien no sabe inglés!). Para hacernos una idea: los países nórdicos tienen índices de Gini en torno a 0,25, España en torno a 0,35, el mítico Bután 0,38, EEUU y China están cerca de 0,45, Brasil en 0,55 y Sudáfrica cerca de 0,63.

¿Y qué tiene que ver ésto con Dennis Rodman y Kim Jong-un?

Veamos lo sucedido. Supongamos por simplificar los cálculos que en la cancha de baloncesto cabían 10.000 espectadores. En la muy democrática e igualitaria Corea del Norte todo el mundo tiene el mismo nivel de riqueza, que cifraremos en unos 2.000 won (moneda de aquellos lares). Cuando tenemos el estadio lleno sabemos que el índice de Gini para los espectadores de mismo será 0.


Pero... ¿Qué pasó cuando Dennis Rodman entró al estadio?. Bueno... lo primero es que cogieron a un norcoreano y lo sacaron a gorrazos para que cediera su sitio a tan ilustre visitante. Sin embargo la riqueza de Dennis Rodman era muy superior a la del resto de los espectadores. De hecho, uno de ellos (que sabía algo de estadística) calculando que la riqueza de Rodman podría rondar los 20 millones de won recalculó el índice de Gini de nuevo: ¡0,49! Dennis Rodman no sólo había traído su presencia... había sembrado en Corea del Norte el germen de la desigualdad.


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